sábado, 28 de junio de 2008

Otoño-invierno


Ella lanzaba mensajes de humo, y yo a veces alcanzaba a verlos. Entonces guardaba la libreta de teléfonos que usaba como anotador y corría en dirección contraria al viento.
A veces la encontraba y otras veces yo me perdía.
Resulta que íbamos en dos trenes que se cruzaban todo el tiempo. El de ella era azul y rosa.
Así que un día escribí un mensaje que puse en una botella que puse en su ventana.
Le dije que lo triste no puede ya ser bueno, pero puede ser hermoso.

lunes, 23 de junio de 2008

San-se-acabó



Una cosa es que acepte el sufrimiento con cierta altura y elegancia, como un personaje de una novela de Fitzgerald que sufre por sus fracasos amorosos pese a su éxito comercial.
Que además tenga la gallardía de llevar en silencio un corazón políticamente incorrecto, que debe escuchar pacíficamente una parva de comentarios insípidos sobre conflictos como "eldelcampo", y encima de todo guardar su opinión para no tener que explicar a cualquiera que no se es un cretino por pensar con aires nostálgicos y peronistas.
Que además no ha tenido el éxito comercial antes mencionado, por lo que lleva una frugal existencia privada de algunos lujos que no despreciaría en absoluto de tener la posibilidad.


Ahora, que tengamos que jugar la promoción para no descender me parece un despropósito. Y estoy harto de que toquemos fondo todos los años y aún asi sigamos cayendo.

jueves, 19 de junio de 2008

Lluvia


Ves esta escena (viajando en un tren azul y blanco, una tarde de lluvia, parado contra una ventana grande y llena de gotas que recorren el vidrio. Es un tren muy lindo, tiene las mejores ventanas, y vos pensás que es el mejor lugar para ver pasar la vida. Llevás el montgomery empapado, las manos en los bolsillos, la mirada perdida afuera. La estación es de una película londinense, tenés ganas de conocer a alguien en el tren atestado para poder hacerle este mismo comentario, pero no encontrás a nadie) y entonces pensás que es posible todavía llevar una vida con regular hermosura, pese a la soledad y a las noches de invierno en que fumás en la cama hasta que escuchás pasar los primeros trenes de la mañana por la estación cercana a tu casa. Ves esta escena desde el refugio parcial que te da el toldo de un pequeño negocio de flores en medio de la lluvia, esperando en principio el semáforo para poder cruzar a tu casa. Las flores tienen más color cuando llueve, las violetas se oscurecen, las margaritas se ponen de un amarillo intenso, y las alegrías del hogar se ponen tan bien que te gustaría llevarte todas a tu casa para poder mirarlas desde la ventana del balcón, ver como la lluvia las mece levemente, como te parece que se divierten como chicos con un regador en verano. El semáforo pasa y te das cuenta que te olvidaste de cruzar, tan embelesado estabas con la tristeza de un jueves con lluvia. También, que sin pensarlo estabas tratando de sacar un cigarrillo del paquete que tenías en la mano, y lo prendés finalmente cuidándolo del viento con tu abrigo. Sabe rico, siempre saben rico los cigarrillos que se fuman en el momento exacto, y éste lo fumás con las manos en los bolsillos, pitando despacito. El viento sacude algunas ramas y una pequeña cantidad de gotas de lluvia caen encima tuyo, dejando un brillo plateado en las partes del montgomery gris en donde aterrizaron. También tu cigarrillo se fue mojando y hay que volver a encenderlo. Del negocio sale una señora con una planta envuelta en papel de diario, y detrás de ella se asoma el chico que atiende la florería. Con él llega la música de la radio, y un pedido de puchos, al que accedés como buen fumador. La música es Artic Monkeys, y pensás que es ideal para el clima que hace. El chico te dice algo asi como que está para dormirse una siestita.
Y ya en tu casa, con la persiana abierta para ver el cielo gris a través del vidrio humedecido, como si miraras desde dos ojos llorosos, tapado con la frazada a colores que tejió tu mamá en una actitud super cool, pensás de vuelta en esa música, en el tren, en las flores de colores y cerrás los ojos pensando que como outsider sos bastante mediocre, y que decididamente, te gusta más la lluvia que el sol.

lunes, 16 de junio de 2008

Yo, tu, él, nosotros, vosotros, ello y super yo


Son los personajes de la novela que pienso escribir.

Sinopsis:
Yo, tu y él formaremos un triángulo amoroso que terminará con nosotros y por lo tanto con vosotros, tan fuerte la maraña de lazos que nos atrapaba, dejándonos a todos en la más sórdida dependencia.
Ello y super yo serán dos recuerdos de historias pasadas cuya función será la de embarrar la cancha, hablando mal y pronto.

No se si ambientarla en el Gran Buenos Aires o directamente en mi habitación.

jueves, 12 de junio de 2008

Ella te quiere a vos // She loves you (fragmento de una carta encontrada en la basura)


(Página suelta de una carta manuscrita salvada de la chimenea. No se que fue del resto)



"... dejar todo para correr detrás de un panal de abejas. Que tonto. Tuve que apagar cigarrillos con las rodillas para perdonarme, sabes? Pero ella era como una escena de una película bélica. Y como yo no era el protagonista siempre terminaba herido. A veces no me importaba. Pero uno no puede vivir con eso dentro, entendés? Así que gran parte de lo que pensaba de todo esto me lo guardaba dentro, durante años hice eso. ¿Vos te acordás de la noche en que Pablo apareció en un burguer king con un saco de invierno absurdo y abajo una remera blanca toda manchada de vino? Yo me acuerdo perfecto. Era por agosto, hacía poco había cumplido años esa chica que habías conocido en la fiesta de tu amigo del trabajo, y habíamos ido a la fiesta que hizo en un bar que era como un sótano, donde toda la gente tenía pelucas con peinados ochentosos que brillaban en la oscuridad. Me acuerdo que vos no le diste bola porque estabas muy borracho apenas llegamos. Ella se ofendió y me dijo que eras un tarado. Yo le dije que tenía razón, claro, y la invité con un cigarrillo de marihuana en las mesas que estaban atrás, donde no te decían nada. Vos ni te enteraste. Te digo la verdad, no es que me encantaba tu chica, pero estaba aburrido y ella tenía linda sonrisa y no quería fumar solo porque me entristecía. Vos te pusiste de novio un par de semanas después con ella y yo me olvidé del asunto. Hasta me gustaba la pareja que hacían, siempre te dije. Así que al principio ni siquiera pensé que iba a terminar todo así.
Ella me llamó primero un jueves. Lloraba. Me dijo que se habían peleado y que necesitaba hablar con alguien urgente, alguien con quien no le diera vergüenza llorar. Ahora entiendo que fue un error decirle que sí, pero fue tan rápido. Vos me conocés. Como cuando me llaman para ofrecerme algo por telefono que siempre dudo pero me convencen. Ella nunca te contó esto, y ahora que se fue, que me llegan postales de europa con su letra prolija de colegio privado te lo quería contar. Nunca pasó nada entre nosotros, ya te digo. Ella venía, se sentaba, cruzaba sus rodillas flaquísimas en mi sillón y me decía que eras el amor de su vida, pero que vos apenas si la querías. Yo escuchaba y asentía y te defendía un poquito.
La última vez, recuerdo, me dio un abrazo y me dijo. Me voy a ir, bien lejos, a ver si me puedo olvidar de él. ¿Por qué? le pregunté, si están juntos y están bien, para qué huir de algo que tanto se quiso.
Ella abrió sus ojos como dos óvalos turquesas y profundos y dijo una frase que aún hoy me persigue hasta cuando sueño: "Porque si me alcanza una vez más la desilusión, no voy a poder escaparme de la pena".
Y me dio un beso y se fue. Desde entonces yo me he embarcado en las más absurdas historias, he sido tripulante en los viajes mas desafortunados, fue captado por los grupos más ridículos y lastimosos, hasta que comprendí que la quería con toda el alma y que también estaba huyendo. De ella, de vos, pero sobre todo de la desilusión completa de nuestro pésima versión del amor y la pena. Tenía que venir y contarte..."

miércoles, 11 de junio de 2008

Corre Forrest



Cada tanto me dan ganas de que me alientes a escapar, a romper mis prótesis y descubrir que sí, que tal vez pueda.
(Mamá dice que tonto es quien hace tonterías. Así que tampoco me consuela mucho.)

domingo, 8 de junio de 2008

Duaca+blog Porteño Nº2


Efemérides
: Un día como hoy, pero jueves y otra fecha, nacía en el barrio de Colegiales el autor del presente espacio.
No olvidarse: Las llaves adentro. Del horno, por ejemplo.
Exposición: del 16 al 17 del corriente, estará abierta la muestra "Resultados de un fin de semana oscuro. Instalaciones hogareñas" que consta de diferentes ambientes "intervenidos" por el autor del presente espacio, tales como "El cuarto sin hacer" "sandwiches de madrugada" y "el canasto de planchar, ese monstruo".
Aviso Parroquial: No pongan billetes falsos en las canastitas, por lo menos.
Lo importante: El dinero, la salud va y viene.

viernes, 6 de junio de 2008

Desafío Actimel


¿A que no me paso 14 días seguidos sin atropellos, enriedos, boletos ida-vuelta, llantos y auto patadas?

lunes, 2 de junio de 2008

Camuflaje


Una de las cosas que más me gusta hacer últimamente es esconderme.
Salir con algo de música en el bolsillo y un libro en la mochila y desaparecer un rato.
Encuentro que cuando estoy perdido es cuando mejor me ubico frente al mundo.

Lo cual además de ser una deliciosa contradicción, es un descubrimiento genial y secreto. Un secreto recién llegado, que durmió un par de meses en el bolsillo corazón de mi campera rocker, colgando en la punta de una silla de mi cuarto.


Hasta que de golpe descubro que si me pierdo, si quedo escondido entre la gente, invisible a la luz, puedo estar tan tranquilo o triste como se me cante. Puedo pensar en nada y terminar pensando en ella. Puedo esconderme y ver la vida pasar un momento sin que nadie se de cuenta.

Pero por más bien que me esconda, siempre me terminan encontrando los mismos pensamientos.
(*) Última foto es robada de thesartorialist

san pedro+ no direction home


Yo le dije que si tenía que elegir una persona para que esté en prisión conmigo iba a ser él. Y ahora lo voy a extrañar, hasta que vuelva.


Es que Ito se me va a españa. A buscar o a perderse, like a rolling stone. Y fuimos a despedirlo nosotros, no-direction-home.


"La vida es una fiesta de disfraces" F.C., San Pedro, mayo de 2008.