Hoy agarró y se me apareció el Arcángel Gabriel Omar. Me di cuenta por las alas.
Inmediatamente procedió a leerme un mensaje extenso y complicado, que evidentemente no había logrado memorizar. Eran unas instrucciones muy precisas sobre un tema que no alcancé a entender, aunque tuve la sensación clarísima de que el ángel me suponía absolutamente al tanto del asunto.
Inmediatamente procedió a leerme un mensaje extenso y complicado, que evidentemente no había logrado memorizar. Eran unas instrucciones muy precisas sobre un tema que no alcancé a entender, aunque tuve la sensación clarísima de que el ángel me suponía absolutamente al tanto del asunto.
A la mitad del mensaje me di cuenta de que no era para mí, y que por algún extraño motivo el mensajero celeste se había equivocado de persona.
Y me dio lástima decirle.
Y me dio lástima decirle.
Cuando se fue, me puse a anotar todo lo que me acordaba en un papelito.